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Tipos de fraude digital y cómo prevenirlos

El fraude digital siempre será un problema en la era de la información online, te decimos los tipos de estafas y cómo prevenirlos. ¡No caigas en engaños!

Tipos de fraude digital

Estos son los tipos de fraude digital más comunes, conocerlas te puede sacar de un gran dolor de cabeza:

1: Phishing (Suplantación de identidad)

El Phishing es un tipo de fraude digital muy popular gracias a su efectividad. Cualquiera puede caer; llega ese correo electrónico, al parecer inocuo, cuya fuente es algo o alguien muy conocida para ti.

Ahí es donde está el verdadero veneno del Phishing, en la confianza que genera un simple email; pero que en realidad pretenden manipular al receptor (tú) para robar información confidencial.

El engaño se concreta cuando el correo incluye links a un sitio web preparado por los criminales, pero que imita al de la empresa legítima, esa que ya conoces.

2: Envío de recibos bancarios falsos

Esto es así: te envían recibos falsos en nombre de empresas conocidas, lo que se busca con esto es que creas en el engaño y hagas un depósito a la cuenta de los estafadores. En un abrir y cerrar de ojos pierdes un montón de dinero.

En un sitio web la víctima descarga el documento falso sin levantar sospechas sobre la estafa. ¡El horror!

3. Instalación de software malintencionado

Con la era digital llegaron las diferentes soluciones de pago online que están cambiando la cara de las operaciones financieras. Pero los peligros son inherentes al ingenuo humano.

Un software malicioso es cualquier software o aplicación móvil que se haya diseñado específicamente para perjudicar a los usuarios o dañar los ordenadores, los dispositivos móviles o el software que se ejecute en ellos.

Para este tipo de programa solo hay una meta: realizar acciones maliciosas, como instalar virus sin el consentimiento del usuario.

Si viste alguna vez la película Ratatouille, imagina que el virus es una versión maligna de Remy, y que tu dispositivo es Alfredo Linguini, totalmente a merced de la rata que intenta robarte hasta los raviolis, sin siquiera darte cuenta. ¡Bon appétit!

4: Robo de datos por web skimming

En el robo de datos por web skimming, se busca extraer los datos de la tarjeta de crédito en el punto de venta y usar esa información para fabricar tarjetas de crédito falsas o comprar artículos que jamás pediste.

Los delincuentes se valen de las plataformas de pago online, por lo que no estaría de más saber cómo funciona una pasarela de pagos.

Por ejemplo, cualquier empleado con acceso a tarjetas de crédito de clientes puede copiar la información y usarla para hacer skimming. Así que mucho OjO.

5: Robo de datos por filtraciones de la empresa

Otra forma de robo de datos de tarjeta es a través de filtraciones directamente de empresas con las que se hace algún tipo de transacción o negocio.

Puede ser el proveedor de cualquier tipo, esta estafa es muy redituable, porque a través de un solo ataque logran acceder a una gran cantidad de datos.

Esto pasa más a menudo de lo que se cree, los empleados de un banco tienen acceso a la información de los clientes, y basta con una manzana podrida para cometer un fraude.

6: Robo de datos en redes Wi-Fi públicas

La palabra clave para este tipo de estafa es: privacidad, o la falta de la misma. Las redes Wi-Fi públicas son de gran valor para poder acceder a internet gratis, pero también pueden ser un caldo de cultivo para fraudes digitales.

¿La razón? No todas las redes son seguras, y lo cierto es que existen puntos de acceso inalámbricos que están creados únicamente para poner en riesgo nuestra privacidad.

Es muy simple, estás en un lugar público, con tu smartphone o tu ordenador, mientras un atacante está recopilando todos los datos que envías o recibes, lo que podría activar el armagedón con el envío de un simple mensaje.

7: Robo de datos por páginas falsas de empresas

Es un tipo de robo muy común, los estafadores crean una página falsa y se hacen pasar por una compañía financiera, lo que buscan es información personal y financiera.

Puede que la página esté muy bien elaborada, la idea es ganar tu confianza. Una forma de protegerte de estas tácticas es verificar que la página es segura. Y que comience con “https”.

8: Fraude por redes sociales

Las redes sociales son otro caldo de cultivo para estafas, ¿la razón? Nuestra información personal está ahí, y lo que es peor, muchas personas no dudan ofrecerla a cualquiera que consideren “de confianza”.

Lo común acá es que los delincuentes ofrezcan servicios. Un ejemplo de ellos es el clásico préstamo a cambio de pocos documentos.

Esto de “pocos documentos” es en realidad un truco para obtener tu información y hacer una suplantación. El resultado son cargos a tu tarjeta por productos que nunca compraste.

9: Robo de documentos de identidad

Vas por la calle y alguien tropieza contigo, con una simple estrategia, a lo Ocean’s Eleven, acaban de robar tu billetera, aunque tal vez el hurto no sea tan elaborado, lo que buscan es tu documento de identidad, y de paso alguno que otro billete.

Lo sabemos, esto no es precisamente un fraude digital, pero el punto aquí es obtener tus datos de cualquier forma para luego hacer el fraude electrónico.

10: Chantaje digital

El chantaje digital consiste en la extracción de datos importantes y hacer una especie de bloqueo o secuestro de dicha información, y luego pedir rescate para liberarla.

Es más común en empresas o dueños de compañías con información importante y clasificada. Este tipo de delito requiere de un gran conocimiento por parte del hacker delincuente.

¿Cómo prevenir el fraude digital?

Hemos recopilado una serie de recomendaciones generales que pueden ayudarte:

  • No compartas datos personales en las redes sociales
  • No te registres en sitios web sospechosos
  • No proporciones datos personales por teléfono.
  • Siempre cierra la sesión después de usar computadoras compartidas.
  • Si la oferta parece demasiado buena para ser verdad, probablemente sea una estafa.
  • Adopta de múltiples capas de seguridad para la autenticación de usuarios.
  • Crea una tarjeta virtual para usar en tus transacciones.
  • Implementa la inteligencia artificial y Machine Learning en procesos de prevención del fraude.
  • Y tal vez la mejor herramienta antifraude y más infravalorada: usa el sentido común.

El fraude digital puede ser una verdadera espina en el trasero, pero puedes reducir la hinchazón si sabes cómo prevenirlo, recuerda que guerra avisada no mata soldado.